Dr. Peter Attia es una figura destacada en los campos de la longevidad, la salud y la optimización del rendimiento. Es un médico, investigador y orador que se enfoca en promover una comprensión más profunda de la salud y el bienestar humanos.
En el artículo se reproduce su conversación con Andrew Huberman quien es un reconocido neurocientífico y profesor del Departamento de Neurobiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford. La entrevista se puede ver en YouTube:
Dr. Attia dice: „Uno de los sellos distintivos de mi existencia siempre ha sido, ya sabes, una cantidad increíble de ira y rabia. Ha estado ahí desde que lo sé, así que no tengo un recuerdo consciente de no tener rabia. Así que los primeros recuerdos de mi vida, cuando tenía 5 años, tenía una rabia que no puedes creer y es un problema toda mi vida.
Cuando era adolescente, si pasaba más de dos semanas sin hacer un agujero en la pared de nuestra casa, era un milagro. Quiero decir, soy tan bueno con paneles de yeso que no puedes creer lo bueno que soy para todas las cosas que tengo que reparar en nuestra casa. Como si estuviera rompiendo ventanas, lo estoy rompiendo simplemente porque no me gusta. En cierto modo, y por supuesto, racionalicé cuánto me salvó la vida el boxeo porque tenía esta increíble salida para mi ira.”
El boxeo como salida
„Si básicamente tengo que hacer ejercicio 6 horas al día, estoy golpeando a sacos de boxeo todo el día y es simplemente una hermosa salida que me mantiene fuera de la cárcel. Una gran parte de esa ira fue hacia adentro, así que no es ciencia espacial entender que una persona que tiene tanto odio por todos tiene una enorme cantidad por sí misma.
Por eso, una de las cosas que no me di cuenta que estaban sucediendo fue cuál era mi monólogo interior. Porque, como puedes apreciar, tu monólogo interior es tan frecuente, ubicuo y presente que es fácil casi olvidar que está ahí. Ya sabes, como David Foster Wallace dijo, esto es como el agua, los peces nadan en el agua, el agua está en todas partes, ni siquiera se dan cuenta de que están en el agua.”
El monólogo interior
„No te das cuenta del flujo subconsciente de pensamientos que fluyen constantemente. Pero si finalmente me di cuenta de lo que era esa conversación interna y era la conversación interna más enojada, la más violenta que puedas imaginar. Quiero decir, era como si no hubiera ningún error que podía hacer que no resultara en que lo que yo llamaría mi Bobby KN interior se volviera balístico. (Nota bene: Bobby Knight, conocido como “The General,” fue un legendario entrenador de baloncesto universitario estadounidense, famoso tanto por sus logros en la cancha como por su temperamento explosivo.)
Así que simplemente no importaba si no cocinaba perfectamente un bistec, si no lograba perfectamente algo que estaba haciendo, si no hacía nada que fuera perfecto en lo que describí como grado perfecto, me gritaría a mí mismo.
El cambio necesario
“Quedó muy claro que eso tenía que cambiar porque cuando te odias tanto a ti mismo, por definición, vas a ser un imbécil insoportable para todos los demás porque simplemente eso se va a extender a la forma en que interactúas con el mundo. Así que, ya sabes, estaba trabajando con un terapeuta que me estaba enviando a este lugar en Arizona y ellos propusieron que podía deshacerme de este rasgo si estaba dispuesto a hacer cierta cantidad de trabajo.
Por 47 años, esta ha sido la única forma en que he interactuado conmigo mismo, ¿cómo podría esto deshacerse? Se necesitarían otros 40 años para deshacer esto y ellos dicen: no, no, no, aquí está este ejercicio. Si iba a hacerlo, el ejercicio era que cada vez que hacía algo en lo que tenía esa conversación interna, tenía que detenerme inmediatamente y fingir que no era yo quien acababa de hacer eso, sino uno de mis amigos más cercanos.”
El ejercicio de la auto-compasión
En cambio, le hablaría audiblemente a esa persona, no hay nadie más allí, pero le hablaría a esa persona, como si ella es la que cometió el error.
Por supuesto lo que diría en esa situación fue mucho más amable, quiero decir infinitamente más amable, es como si se lo estuviera diciendo a mi amigo más cercano, lo iba a decir de una manera muy amable. Tuve que tomar un copia de ese audio y enviarlo por mensaje de texto a mi terapeuta.
La transformación
En ese momento confié en mi terapeuta a un nivel muy profundo, pero pensé, vaya, eso es una montaña, bueno, ya sabes, esta pobre persona recibió muchos mensajes de texto, muchos archivos de audio. Pero aquí está la parte que me deja boquiabierto, solo me tomó unos cuatro meses deshacerme de Bobby Knight.
Como ya sabes, teníamos una especie de modelo mental de cómo se veía esto, que era Bobby Knight, que era el presidente de la junta en la que se sentaba en la sala de juntas y nadie más pudo hablar. Para aquellos que no lo saben, Bobby Knight tenía un temperamento terrible, sí, sí, lo peor.
El impacto de la neuroplasticidad
Este es el tipo que estaba tirando sillas a través de la cancha de baloncesto y de repente, llegamos al punto en que Bobby Knight ya ni siquiera está en la sala de juntas. De hecho, mientras digo esto hoy, realmente no recuerdo cómo sonaba, quiero decir, es increíble para mí y he tenido algunas oportunidades realmente increíbles para traerlo de vuelta.
No es que esté cometiendo menos errores. No es que sea mejor hoy que hace 3 años en todas las cosas que hago. En realidad, probablemente sea peor. Pero la diferencia es que puedo comunicarme conmigo mismo. Creo que puedo decir esto. Creo que puedo decirlo con amor, y tal vez no con tanto amor como algunas personas.
Conclusión
„Sigo pensando que probablemente tenga un estándar un poco más alto conmigo mismo de lo que tal vez necesito a veces, pero simplemente no me estoy castigando como solía hacerlo y creo que, por extensión, estoy golpeando a otras personas mucho menos.
Creo que es un paso práctico. Primero que nada, es algo de lo que nunca había oído hablar antes. Pero ciertamente representa este increíble fenómeno de neuroplasticidad porque 4 meses suena como un poco de tiempo y, sin embargo, tenías 47 años de conversación interna absolutamente reprensiva. Eso es lo que parece, así que es algo que la gente puede pensar por sí solos para sus propios fines.”
